jueves, septiembre 29, 2005

EL SÍNDROME GIRONELLA

-STAFF VS. CANON. Dos folios no es nada. Así que voy al tajo. Matizaciones de lo tuyo y de lo mío. Un Staff no es un concepto empresarial. Es un concepto ejecutivo. Cuando aludo a que España tiene Staff y no canon, aludo al hecho de que los chicos y chicas del canon actual, participan de la gestión del canon actual. Son, así, en parte sus ejecutivos, su staff. Es decir, no sólo promueven y elaboran una cultura sin conflictos, sino que velan también para que así sea. Lo cual, a su vez, es una dinámica absolutamente agresiva, si bien silenciosa. Implica, por ejemplo, arremeter, sin conflicto ni polémica, contra los conflictivos. Esa dinámica personal, no entiendo por qué no puede ser también de empresa. Las empresas no son de madera. Mira Endesa. Anyway.

-CONFLICTOS SiN CONFLICTO. Los profesionales de la cultura-no-conflicto empiezan a ver, me consta, que una cultura conflictiva les dejaría en la cuneta del canon, si bien no necesariamente del éxito. El canon del éxito es, obviamente, insostenible. Por esa razón Gironella o Salisachs nunca entrarán en el canon del siglo XX. O, en el del XIX, pongamos, Echegaray –Eche Garay, aprovecho para preguntártelo, ¿no será familia paterna tuya, Eche Varría?-. Prueba del algodón –de la idea de que el conflicto supondría el fin de una era / canon-: Juan Goytisolo, tras un artículo publicado hace 4 años –a) un artículo ñoño, en el que reivindicaba un papel para la cultura arcaico, si bien b), y en lo que puede ser un indicativo de la falta de debate en la CT, es tal vez la mayor crítica a la CT publicada-, fue contestado por Rosa Montero, aduciendo –hablo de memoria-, que la literatura española había vivido en democracia un éxito sin precedentes, en tanto sus escritores nunca jamás habían discutido, páramo / panorama al que sería deseable volver. Y al que, zás, se volvió. El Staff del no-conflicto se confunde con Prisa porque ha concurrido, en efecto, en El País. Y sigue concurriendo. Eso es una patología. Pero no es LA patología. LA patología es que no hay dos diarios en los que pueda concurrir el canon. O, lo que es lo mismo, que la derecha no sólo no participa-ó en la elaboración del canon, sino que no ha tenido éxito –por jugar fuera de casa- en la creación de un modelo cultural democrático, si bien el resultante, por cierto, le supone un chollo. LA patología consiste, pues, en que la CT es, tal vez, la única y gran aportación de la izquierda a la Transi, proceso que, por otra parte, fue el gran fracaso de la izquierda. Tu idea, por ejemplo, de literatura desarticulada, viene precedida por dos (auto)desarticulaciones: la de la cultura conflictiva y la de la izquierda, que la elaboraba.

-¿HAY LUZ EN LAS TINIEBLAS EXTERIORES? Todo ello nos lleva a tu pregunta. “¿En la España de Zapatero, ¿existe un canon alternativo al que consagra el Staff de Prisa?”. Matización a): España no es de ZP. Es de la CT. Una CT que, por otra parte, no entiende a ZP. La CT no es sólo El País que, por lo dicho más arriba, ha podido elaborar canon, y no así, pongamos, El Alcazar. La CT es la cultura española. Y su canon. Confundido absolutamente con la CT. Hoy, en El País y en El Periódico aparecían sendos artículos de Ramoneda y de Azúa en los que describían su incomprensión hacia el nuevo Estatut, un objeto no-CT, y al que la CT le costará un huevo describir. Si al final el Estatut se aprueba en el Congreso bajo su aspecto no-CT, no sé quién lo describirá. Ignoro por qué, de pronto, cierta izquierda peninsular emite no-CT en un momento dado. Pero ello me remite a la siguiente patología: la realidad española –incluso la española, vamos- es más ágil que la CT que la describe. Lo cual, a su vez, me remite a otro canon del éxito anterior al actual canon del éxito, formado por chicos cuya función no era el cambio, sino también la estabilidad. Me refiero a los Gironellas -¿The Gironellettes?-, a los que tu sitúas como fundadores del marco de lo posible en la literatura de los 80’s. Y aquí me saco de la maga -para realizarte luego la pregunta del día- el concepto Síndrome Gironella, consistente en lo siguiente: ser pieza clave del canon del éxito hasta ser substituido, cruelmente, por otro canon del éxito, al cambiar únicamente la noción de cultura. Pregunta: El actual Staff / canon literario español, ¿sufrirá el síndrome Gironella, o la CT es la forma definitiva de la cultura de masas –y a secas- española? O, en otras palabras, ¿quién no será Gironella de todo nuestro pack de canon de la actualidad? ¿Por qué? Toma moreno. Mañana como con Juanito donde siempre. Estás invitado, mamón.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Vale con lo del pullastret, pero lo del Eche Garay no hace gracia ni a un parvulito. En fin, que les aproveche el menú infantil.

Anónimo dijo...

Vale con lo del pullastret, pero lo del Eche Garay no hace gracia ni a un parvulito. En fin, que les aproveche el menú infantil.

Anónimo dijo...

Ah!, otra cosa. Alguno de ustedes dos, no sé si Eche Varría o Eche Martínez dijo que ninguno de los dos emite des de la CT, o sea desde medios CT, o sea desde PRisa. ¿Lo decían en serio o era otra broma?

Anónimo dijo...

Blogger:
Esto no es una tertulia. No tertulianice, no diga cosas que no se han dicho. Sobre lo dicho: ¿es posible emitir no ct desde un medio ct?

Anónimo dijo...

Mi respuesta, agente,es no. No se puede emitir no CT desde un medio CT. Como no se puede emitir en tertuliano en un medio no-tertuliano. Todos los juegos tienen sus reglas.

Ah!, agente, celebro que alguien sepa hacia donde no nos dirigimos.

Anónimo dijo...

Por supuesto que es posible emitir no CT desde un medio CT, es una cuestión de la capacidad (y voluntad) del emisor para hacerlo y sortear las barreras que se le pongan. Que dure ya es otra cosa, caben dos vías me parece, a) el emisor se cansa de zigzaguear y se acomoda en la CT b) el emisor manda al medio a tomar por saco y se busca otra manera de emisión no CT que por suerte ahora están un poquito más disponibles.

"Cuando la crítica literaria burguesa felicite a los autores de opiniones políticas revolucionarias, éstos tendrán que preguntarse qué errores han cometido" Guy Debord, 1957.

Anónimo dijo...

O sea no.