domingo, diciembre 04, 2005

KO EN OK /CT CORRAL

La que aludes es, no obstante, una ocasión para ser descartada. En lo que es un problema carajo-de-una-vela-size, que en el último párrafo de este articulote te esbozaré. En todo caso, no me acabé de leer, en su día, el artículo que citas. Me lo he comido tras tu cita. Es un artículo que carece de interés. O lo que es lo mismo: el interés del artículo es filológico. Seguidamente te desgolos algunos aspectos filológicos que fijan el artículo que citas en su tiempo/espacio. Alehop.

-CAPTATIO BENEVOLENTIAE. El fragmento mamada es considerable y, sí, en efecto, fija el texto en su momento histórico. El momento histórico –la CT, 70’s hasta esta mañana a primera hora- me lo definió de película el otro día el escritor Javier Calvo cuando me dibujaba el mapa de la literatura española actual. Ahí va: “si quieres entrar en el sistema debes de envejecer 30 años”. El fragmento mamada no es, por tanto, una mamado ad-hoc. Es un intento de envejecer 30 años. Es decir, reconocer, aproximarse, valorar positivamente, penetrar y envolverse en una generación, que no es la tuya, y que adquirió forma de Staff –y de portero del Staff- hace 30 años. Un artículo de opinión que se inicie follándose esos 30 años de tapón generacional –que son, guau, muchas generaciones-, tendría el peligroso aspecto de objeto beligerante. Es decir, de cosa anti-Ct. Es decir, de algo impublicable e ilegible, de algo no perteneciente a la serie cultural. La Captatio Benebolentia es un género típicamente CT. Es decir, español. Ejemplo. Yo sólo leo el ABC en el Puente Aéreo. EL otro día ley en el ABC / Puente Aéreo tres artículos cuyo 50% se iba en mamársela a Capmany. Es decir, a) en mamársela a un muerto. Es decir, b) en demostrar a tus superiores y a tus lectores que tenías 30 años más de lo que parece. Quizás –se trata de Capmany-, muchos más. En otras culturas eso no es necesario. En la RFA, en este preciso instante, cierta literatura está follándose viva a la generación del 68 –desde, snif, la derecha-, sin ningún tipo de tabúes y con una violencia llamativa –la cultura es una violencia llamativa-. En Francia, una cultura más dada a la beligerancia, Le Monde ha jubilado a una generación de articulistas –del 68, más o menos-, por su incapacidad para leer el presente. No te puedo dar, por desinformación mía, más detalles sobre ello. Pero, en todo caso, te puedo asegurar que los nuevos articulistas no se verán en la obligación de sacrificar un 50% de sus artículos en demostrar que son como ellos. Lo cual es un relajo.

-LA COHESIÓN. El artículo ilustra lo que es el límite de la polémica en la CT. No desautoriza a nadie, no se enfrenta a nadie sino que matiza un tema. El tema, además, es el gran tema de la CT. La Cohesión. Pradera defiende –en una lógica muy CT-, que la cohesión es lo que hay, es el gran logro de la Transi, y que cuestionar el pasado no sólo no crea Cohesión, sino que es un radicalismo ciego y descohesionador de una minoría -¿”talibanes con complejo de Peter Pan?-, que no se entera que el pasado no es un tabú ni afecta al presente, tal y como demuestra la ingente bibliografía sobre el pasado. No ha habido pacto del olvido. Quién diga lo contrario no está al loro y está contra la Cohesión. Además, corre el peligro de tener 30 años menos. El posicionamiento Cercas es una matización del anterior. Echa de menos "un relato consensuado de nuestro pasado inmediato que, como un mínimo común denominador, sin tergiversar la realidad histórica, sea aceptado por la mayoría de la sociedad". Pero desde la Cohesión. Y aquí te tengo que decir que yo también. Pero sin lo de la Cohesión de los XXXXX. Es decir, sin creer que ese relato lo tenga que hacer el Estado o/y la literatura española staff. Lo tendría que haber hecho el Poder Judicial, a través de unos juicios de Nuremberg, cuyas sentencias –leves; en los 50’s sólo había un condenado en chirona-, si uno se fija, son “el relato consensuado” del “pasado inmediato que, como un mínimo común denominador, sin tergiversar la realidad histórica” ha sido aceptado por la sociedad alemana. Es decir, que en Alemania los fascistas no eran esos pollos cachis-pirulis, que escribían que tiraban de espaldas sin bien tenían la pistola fácil. Eran usuarios del genocidio, del asesinato como sistema, por lo que merecían juicio por crímenes a la humanidad. Como, por otra parte, y en lo que es una idea no cohesionadora, lo merecían los fascistas españoles. Humm. No es extraño que las únicas reseñas negativas a la novela-canon de Cercas se emitieran en Alemania, ahora que lo pienso. Ahora que releo la polémica Prader-Cercas desde ese punto que tienen en común que es la Cohesión, se me ocurre que el vértice de la cosa anti-CT es el desinterés absoluto por la cohesión. Es decir, que la literatura y la política no tengan como objetivo la Cohesión, enviar al garete la Cohesión, y que el arte y la política se empleen a plantear la realidad, sin el temor de que la sociedad –un conjunto de menores de edad y deficientes mentales, según la CT-, se desintegre. Las sociedades no se desintegran. Se las desintegra. Estén cohesionadas o no. Es bueno, o incluso irrelevante, que se expongan al vértigo de una literatura o una política que no haga énfasis en la Cohesión. Es bueno, por tanto y al hilo del artículo de Cercas, que el Estado no tenga un catecismo sobre nuestro pasado, y que la sociedad polemice, por libre, sobre el pasado. Es bueno que un partido defienda que el franquismo fue chachi, es bueno que un partido organice manis por la unidad nacional, que intelectualice su post-franquismo a través de la Consti. Y es bueno que se le pueda dar para el pelo defendiendo otra lectura del pasado, abiertamente antifranquista y con otra lectura de la democracia. Es bueno poder argumentar en público el carácter antidemocrático de un partido que defiende una idea ecuménica de pasado, asumida por todos, que nos impide ver el pasado y el presente. Es bueno que el terror a perder Cohesión desaparezca.

-EL VALOR DE LOS MATICES. La ¿polémica?, el duelo en CT Corral es, por tanto, una polémica/duelo de matices. Que, por otra parte, es lo que ocurre en la culturas verticales, cerradas. A mi, y en lo que puede ser una imagen desafortunada, que me rejuvenece peligrosamente 30 años hasta situarme en mi propia edad, me recuerda a las polémicas franquistas, en las que un tradicionalista y un falangista, unidos por un pasado de combate común y por un futuro común repleto de cohesión y de SEAT-600, polemizaban sobre aspecto mongos y baladíes de la realidad. Esas polémicas existían incluso en la Rumanía de Ceaucescou. Generalmente las practican intelectuales autorizados. En Cuba suele iniciarlas, incluso, Fidel. Gramma, por ejemplo, no habló por escrito de la existencia de prostitución hasta que Fidel aludió el tema. Que las polémicas españolas sólo sean de matices explica el lugar en el mundo de la cultura española, una cultura estrecha, en la que grandes parcelas de la actualidad desaparecen del campo visual. Una cultura en la que uno se siente –y, snif, lo sienten- desautorizado al plantear problemas, por lo que opta por crear problemas de matices, antecedidos por Captatio Benevolentiae por un tubo. Las polémicas de matices, en fin, sólo tienen el objetivo y el resultado de satisfacer a la CT, que a través de ellas se visualiza como un objeto libre, culturalmente rico, capaz de platerse –y de solucionar- problemas. El desinterés por la polémica, que te comentaba mucho más arriba, me viene de ahí. No me aporta nada. A la CT le aporta verse cachas y à la page.

-¿DÓNDE SE DESARROLLA LA CULTURA? ¿Dónde se desarrollan las polémicas? ¿Dónde se desarrollan las problemáticas? ¿En qué medio pueden aparecer polémicas no CT? ¿EN qué medio o lugar puede hablarse, pongamos y para seguir con el ejemplo, del pacto de silencio de la Transi, sin tener 30 años más y sin perder el culo por la Cohesión? A mi no se me ocurre ningún medio. Y el único lugar que se me ocurre es la cabeza del lector. ¿Pero leyendo qué? ¿Dónde?

No hay comentarios: