miércoles, mayo 25, 2005

EL TÍO FACUNDO Y EL TÍO HUCHT

-FULGOR Y MUERTE DE ESTE BLOG. Las reglas del juego de este blog son, si me permiten reformularlas, las que aquí siguen. Se trata de observar los productos que emite la CT –la realidad, snif, es uno-, y deconstuirlos de la peana, si es posible, a través de otro punto de vista. Que ignoro cual es, pero que no es la CT. Es el punto de vista que usted y yo construyamos, pues no hay puntos de vista culturales de una sola persona. Todo ello se hace a partir de noticias y situaciones de la actualidad. Es decir, siguiendo un orden que le viene al blog desde el espacio exterior. Por si fuera poco, para interrumpir aún más la cosa, cuando se tercia el blog intenta dar juego de piernas a las propuestas dialécticas de su público. Sea como sea, la estructura de funcionamiento del blog que les he explicado –compleja-, y la estructura de funcionamiento de mi trabajo –complejo-, me convierte en una especie de mujer moderna que no muere en el intento. A saber: debo de estar cachas en el curro y, además, debo de estar buenorra y, a poder ser, limpia, en mi casa –y la suya-, que es este blog. Porque, snif, les quiero, y no quiero que me dejen por otra. Por lo que además, y por el mismo precio, intento subir banda y dar espectáculo para ustedes. Bueno, todo esto viene a que hoy tendría que hablar del tema Carod-y-Maragall-se-lo-montan-en-Jerusalen. Pero por el extraño funcionamiento del blog, les voy a tratar, again, el tema Hutch, o el republicanismo periférico, asociado a estados de ánimo nacionalistas, como lo único que queda del republicanismo de antaño. Ahí va.

--HUTCH. Este blog no es un consultorio. Pero tiene cierta tendencia al compadreo. Ayer, un lector llamado Anonymous –nota: me gustó mucho su Mahabarata-, asociaba mi descripción del único republicanismo cachas que veo en la plaza –un republicanismo que convive con los nacionalismos periférios; sobre todo y fundamentalmente con el catalán- con una apuesta personal. No es tal. Es una descripción. Me gustaría ver un republicanismo vertebrador, cachas y que chulée a la CT. Como me gustaría describir Cuenca y hacer especial hincapié en su aeropuerto internacional. Pero ambos dos fenómenos no son así. El blog, de hecho, parte de una idea poco animosa, chachi y piruli: la CT no funciona, no satisface las funciones deseables en una cultura, no ofrece productos saludables, ni facilita una vida saludable. El blog, por lo tanto, parte de cierto desánimo. La ausencia de un republicanismo como el que el lector describía, puede ser uno. La ausencia de un republicanismo autosuficiente, que no utilice la CT, la ausencia de un republicanismo con un proyecto político y cultural, con una cultura beligerante y a tomar por XXXX de la CT es, en fin, un hecho. Como es un hecho que los grandes esfuerzos iniciales de la CT fueron exorcizar cualquier republicanismo. Como, snif, es un hecho que la Guerra Civil y la dictadura franquista fueron también dos fenómenos encaminados al exterminio de una teoría de la cultura. Ruego a los lectores que me hayan seguido hasta aquí y que conozcan o reconozcan un republicanismo evidente y existente diferente al que les he descrito, que me lo presenten. Posiblemente cualquier cambio cultural –un auge del republicanismo sería uno-, pasan por empezar a hablar, por primera vez, del fracaso cultural de la CT. Yo, a estas alturas, me limito a eso. Y, además, desde una soledad casi extrema.

-HUTCH JUNIOR. Hola. Me llamo Hutch junior y soy pariente del párrafo anterior. Mi cometido es dar por sentado que el párrafo anterior va a misa. Para demostrarles que la tradición republicana ha sido en parte asimilada, raptada, o salvada –que no lo sé- por algunos nacionalismos periféricos –que son la única posibilidad de roce con la CT en esta plaza, repito-, me remito a lo dicho y a lo que se dirá. Por ejemplo, mañana, cuando Martínez vaya y analice por qué Carod y Maragall protagonizaron su gag Monty Python en Israel, y por qué Bono o ZP jamás podrán protagonizar ese tipo de shows. Y para demostrarles la rareza consistente en que ese republicanismo latente, implícito, no se haya traducido en una óptica cultural diferente a la CT, para demostrarles que el republicanismo periférico no aporta una cultura diferente, posiblemente porque está unido a la suerte del Estado en su periferia, como la CT gansa está unida al Estado ganso, ahí van estos dos párrafos.

-LITTLE HUTCH. Conversación con Ferran Torrent. Novelista valenciano en catalán. O como se llame esta mañana a primera hora la variante dialectal del catalán que se hable en el país Valencià, Regne de València o Comunitat Valenciana –la CT es rica en conceptos que eliminan conceptos-. Torrent es independentista y republicano. Se supone que esos dos palabros podrían acotar su público notoriamente. No obstante, este año Torrent aceptó ser finalista del último Planeta, con una novela terminada a la vez en catalán y castellano. Lo que puede orientar a la idea de que la literatura catalana –vinculada a ciertos inputs no CT-, no tiene por qué diferenciarse mucho de la literatura española, absolutamente CT en casi todos sus tramos. Y absolutamente CT en sus premios literarios. Hablo con Torrent, alehop, de literatura catalana, ¿un corpus poco diferenciado, también, de la literatura española? “¿La literatura francesa crees que se diferencia de la española y la catalana? Ni en la literatura española ni en la catalana ha surgido ningún autor que haya creado debate”. “Si hay alguna diferencia entre ambas literaturas es, ahora que lo pienso Sánchez Piñol –La pell freda-, un tipo raro. Si escribiera en castellano, lo suyo hubiera sido un best seller europeo”. Nota mental: La pell freda es cultura de masas, una novela internacional, sustentada en un argumento cachas y una estructuración cinematrográfica. “Crear un universo novelístico no es fácil. La novela y el cine precisan argumentos y personajes ricos. EL problema al respecto de eso en catalán es el idioma. Muchos narradores utilizan los mismos registros para hacer hablar a los personajes y al narrador”. Aparte de eso, “la literatura española y la catalana viven en el mismo Estado. Un lector catalán y otro español tienen las mismas referencias”. ¿La única originalidad de la cultura catalana es, pues el idioma? “El nacionalismo catalán y el español tienen en común la reivindicación lingüística. Aparte de eso, una cultura es algo complicado. Todo es muy homogéneo. Hay McDOnalds en todas partes”. Ningún lector, en fin, puede recurrir a la literatura catalana, la literatura fabricada por la sociedad menos CT del Estado, para encontrar algo diferente a la CT.

-BIG HUTCH. O sí. En el ámbito de la literatura catalana ha nacido la primera actitud colectiva en contra de la CT. Se trata del grupo Els Imparables, presentados en una antología poética homónima y con un manifiesto literario conflictivo. Hablo con Héctor Bofill (Barcelona, 1973), doctor en derecho y profesor de la UPF, autor de La independència i la realitat -va por la cuarta edición, un ensayo sobre el proceso de soberanía en Catalunya a partir de las herramientas constitucionales actuales- novelista -premio Josep Plà de novela-, y poeta. Els imparables es un grupo ¿generacional? ¿de amiguetes? que, en todo caso, ha sido el primero en plantear la decadencia literaria y cultural por aquí abajo. Algo que estamos tardando generaciones en plantear. Lo que puede indicar la gravedad y la violencia del asunto. Bueno. Al tajo. La CT, observada desde la cultura catalana, esa cosa tan poco diferenciada, como hemos visto, de la española: “La cultura catalana hace 20 años que se degeneraba hacia el populismo, esa cosa que está sustentada en la ausencia de conflictos”. ¿Nacionales?. “No. De todo tipo. La gente se ha cansado de un populismo no conflictivo, de un relato urbano con algo de ironía que yo llamo cofullisme –trad.: ¿preciosismo?-. Escritores que escriben de temas poco conflictivos, como el fútbol”. No veo al personal muy cansado. Es más, tras la Transición, para muchos ciudadanos la cultura es ausencia de conflicto. “La cultura no conflictiva es herencia del pacto de silencio de la Transición. La solución es acabar con ello. Vivir en una realidad más conflictiva. Els Imparables apostamos por el conflicto como motor de la realidad, en los géneros que tratamos, que van desde la poesía hasta el ensayo político”.

Guau. Suena a música celestial. No obstante, como lector, no encuentro serias diferencias entre la poesía y la narrativa que emiten los usuarios del grupo. Tampoco encuentro anti-CT el uso del premio literario –el motor de la creación del canon en la CT-, que realizan los usuarios del grupo. El canon poético que defiende –catalán, intraducible al castellano-, por otra parte recupera figuras que, en los 70’s, lo que apuntaba a ser lo anti-CT, ya había descalificado. Como Salvador Espriu. Otra cosa es el pensamiento político, que me parece muy atractivo, por su carácter democrático y conflictivo. Vertebran posicionamientos democráticos, radicales, republicanos. Dentro, eso sí, de coordenadas nacionalistas, como les describí ayer que es el caso de la cosa –verbigracia: “La gente joven nos creemos que vivimos en una democracia, y hay tabúes que nos los pasamos por el forro. Como hablar de soberanía”. Otra prueba, quizás y en fin, de que lo poco republicano no repercute en una idea de cultura, sino en una idea política. Por primera vez en la historia de aquí abajo. Lo republicano ha pasado tal vez de ser un proyecto cultural y vertebrador a ser un proyecto político y vertebrador –de nuevas entidades políticas-. CT, 1 – Cultura republicana, 0. Les ruego que estudien la paradoja –una paradoja es algo más complicado y vistoso que una Pantoja-, y que no se pongan flamencos como una Pantoja y que me / nos orienten.

Mañana, si es jueves, estamos en Jerusalem

5 comentarios:

Gachas dijo...

Shalom, Guillem: ufff, que susto nos has dado, pensé que cerrabas el quiojco. Menos mal que no.

Anónimo dijo...

No sé yo si es el mejor momento para irnos a Jerusalén a hermeneutizar la foto de la corona de espinas...¿Nadie más ve en esta foto las tetas de Pamela Anderson, en otras palabras, una estrategia para desviar la atención de los modestos resultados de la investigación parlamentaria sobre el 3%?

Anónimo dijo...

Encuentro este blog escrito a su bola: con una infinidad de paréntesis que se suceden en artículos inacabables, en ocasiones, de difícil lectura (al menos para mí), además de impublicables en ningún otro lado. Pero todo esto es lo que me gusta de este sitio. Es como asistir día a día a la creación de sus Pinturas Negras particulares.
Por eso, me atrevo a darle el siguiente consejo: no nos haga ni puñetero caso.

Anónimo dijo...

De acuerdo con Anonymous. Parece que a Artur tambien le tiran más las tetas (de PA) que las carretas ("vostè té un problema que es diu 3%)). Según oigo en la radio, al jefe de la oposición le ha impresionado tanto lo de la corona de espinas que no ha parado hasta que Maragall ha reconocido su estupidez. Esta vez el acto de contrición no se ha hecho esperar, ves que bé! Una se pregunta si el Parlament no es una especie de templo, con sus rituales expiratorios, con sus santitos...

Anónimo dijo...

Catetoababor, de acuerdo con casi todo menos con lo de la Pintura Negra particular y con su consejo al anfitrión. Si el no saber qué cosa es ésta le genera ansidad, no sé...¿Por qué no prueba a imaginar que esto es un cadáver exquisito que vamos cosiendo entre tod@s?